El aullido de Tay.

A mi no se me da el misterio ,como a muchos , pero me remito, a un tiempo no muy perdido para referirte una historia -me hablaba el abuelo Yayo - un día domingo, mientras tomamos mate alrededor de la cocina,era uno de esos tantos días de lluvia; a decir verdad, no se si era la tercera o quinta vez que me contaba lo mismo, quizás desde sus profundos y viejos recuerdos llegaban cada vez , un mejor detalle de lo ocurrido y de lo que que nadie tenía explicación. Otros no querían recordar y menos aventurarse siquiera por esos lugares en medio de aquel bosque cercano , donde había sucedido aquello, es decir  al ir a conocer la laguna Tay, que según decían algunos , era tan transparente como espejo, dibujando su fondo de truchas y a veces tan oscuro como la noche con vapores nauseabundos,  que no se podía saber de donde provenían , pero que ,cuando aquello pasaba, obligaba a muchos a retirarse rápidamente de ese lugar.
Mas,  lo que le sucedió a una pareja de amigos pescadores ,que un día de verano decidieron ir  hasta ese lugar , hizo la diferencia .La laguna quedaba muy cerca del pueblo y con la intención de traer una buena pesca, se adentraron por el único sendero que conocían y que muy pocos se atrevían a explorar. Desde su ingreso al lugar ya les pareció algo extraño, por la brisa algo pesada y como que la vegetación de pronto iba adquiriendo una forma más cerrada y de enormes dimensiones , aparecieron los helechos y enredaderas que se interponían al paso , pero éstos arremetieron en su empeño y avanzaron sin detenerse porque a su vez sentían que algo les tironeaba o les aguijoneaba el paso , de pronto se dieron cuenta que el tiempo pasaba y no llegaban a destino, uno de ellos reconoció,  que al parecer habían estado dando vueltas por el mismo sitio, pero no se explicaban como podría suceder , si habían seguido el camino de antes y tampoco encontraban la salida.
De pronto escucharon un aullido , que parecía llamarles desde la densa floresta , sintieron un inusitado terror y emprendieron carrera para querer volverse , corriendo sin ver por donde iban, hasta que de pronto llegaron por otro extremo a la orilla de la laguna ,lugar que nunca habían pisado , al parecer estaban por el lado este del lugar,  cuando siempre llegaban por el lado oeste de aquel ojo de agua en medio del bosque.
Los amigos se encontraron ahí de pronto frente a la laguna, que estaba con una densa neblina y corría un viento suave que traía como un olor nauseabundo ,cosa que antes habían sucedido. Y de pronto para sus sorpresa empezó a levantarse la niebla y quedó despejado el contorno  circular de la laguna ,como no era ancha se podía ver completa , ellos se sonrieron pensando que estaban asustados por nada y que aquel olor podría ser de vegetación en descomposición o algo así, entonces quisieron ponerse a pescar sin demora.
Mas antes de que empiecen en esa faena , se volvió a escuchar ese grito sobrehumano que estremeció el lugar y  mientras miraban a todos lados pudieron ver que al otro lado de la laguna se  levantó del agua un bulto informe, oscuro ,chorreante de algo viscoso,  pero que destacaba en su especie de cabeza unos enormes ojos rojos que parecían centellear fuego a la distancia y que lanzando otra vez ese grito espeluznante se dirigió a toda prisa hacia donde estaban los pescadores, haciendo una enorme ola en el agua y aullando.
Aquellos hombres olvidaron todo y huyeron despavoridos por el bosque sin saber por donde se iban y cuentan que ellos sentían que aquel espectro les perseguía a través de aquel bosque enredado. No pararon de correr hasta que alcanzaron un claro en su huida y cuando se dieron cuenta se encontraban  a una distancia considerable del pueblo y como encontraron un río , lo siguieron corriente abajo, y así ,  pudieron dar con este.
La gente que los vio  llegar , se sintió muy intrigada de todo lo que ellos relataban , pues había dos grandes misterios : ellos fueron un día domingo a pescar y aparecieron tres días después , pero para los hombres no había pasado más que un día y lo otro ,que fue muy  extraño,  es que uno empezó a encanecer de pronto y al otro se le cayó el pelo.
Desde entonces pocos se atrevían a ir de excursión a la laguna Tay.

(De mi recopilación de cuentos y misterios)
                                                                                     Meulen/2019.-