Aquí estamos otra vez
dentro del ser la nostalgia
dilemas,
caprichos de la mente
batallando en su razón
cuando besa la noche
y se oye una voz esfumada
llegando de tierras lejanas
comprendes otra vez
que son vanos silencios
insomnes esperanzas
desalojadas del corazón
el cuerpo una verdad proclama
lejos de abrazos humanizados
lejos del verso catalizador
ha dejado un hueco la ausencia
donde frialdad y distancia
envuelve todo placer
casa abandonada
hay cicatrices sin cerrojos
habitando los espacios
cansado el pie de caminar
el tiempo desbocado
sin encontrar un sitio exacto
para habitar sin dolor
alejarse de los signos
que te hablan de violencia
que repiten el desamor
sinfonías de quebrantahuesos
alocados y presurosos
dominando el paso del tiempo
temores ancestrales
acoplándose a su gozo
el desquerer
ansias inconfesables
momentos encapsulados
que de pronto acorralan
cual perros insaciables
rabiosos circundan
toda noche fatua
devora cada suspiro
arañando la luna
un grito parido
deshaciendo la mudez
los muros se imponen
la razón se aleja
la desesperanza controla en su cuartel
la humanidad en ti
se siente resquebrajada...
y este ser solo quiere despertar
otra pálida mañana
ver el ave que alza vuelo
por su mar celeste
la justiciera ambrosia
lejos del revés
de presagios que deshacen
la tierra bajo sus pies
¡cómo afianzar las ideas
como liarse las manos
a la corriente fecunda de la vida
a ese árbol milenario
para nunca desfallecer!
¡Que venga otro amanecer
bajo piedras, agua, cielo
que en la misma nada
cual pétalo en el corazón
venga y se haga fruto
una estrella de esperanza!
Meulen/2017