Por el rostro de la tarde
cae y rueda el sentimiento
que solo fue una ilusión velada
venida de ojos desolados
quizás antes de nacer...
quiso robarle a otros ojos su lumbre
y dejar en esos, su huella de padecer...
y se deshizo muy pronto esa breve luz
que alumbraba en esas ventanas...
entonces ya no estás , ya no existes
aunque le busque a luz del día...
y se quedó cual hembra a la intemperie
bajo un manto de lluvia
esperando que pase el vendaval
en medio de la gente que nada deja al paso
fue muriendo la tarde cansina
como el cansancio a cuenta gotas
que fue esa larga espera
por ver el brote de luna azul...
y en este ahora
hasta el viento esquiva el falso respiro
mar adentro quizás vaya a fallecer...
Y al fin está sola
tal fue el camino ya andado
rehacer su ver de vida nueva
deshacer las murallas
hasta de las propias sombras
y de esas supuestas alegrías
de las preseas que nunca tuvo
nada queda por entender
lo falso se esfuma como niebla matutina
nada se puede guardar
de lo que nunca fue...
Salir de la encrucijada
donde no se permite crecer...
con certeza llega el saber
que al final del día funesto
se abre la real puerta
por donde si cabe todo el amor
si cabe la rosa del gran querer
abrigo del silencio
renaciendo
lo que si es sustento
que en el jardín de tu casa aseada
vuelve a florecer.
Meulen/2020
(imagenes de Internet)
