(Mi madre y sus nietos)
En la palma de la mano
entre los dedos enzargados
la mejor diadema ha florecido
tan solo al pensarte vivo
que tu amor está latiendo
en mi sangre almacenado
todo ese sentir sellado
y de todos mis cuidados
en el centro del corazón.
Prende velas de alegrías
por la estancia vivida
prende alas de azucenas
alejando toda pena
que lo que se levanta dentro
es el mejor sostén
de todo lo nuestro
y se almacena la más querida
flor de nuestra vida
la ofrenda milagrosa
a los pies de la dadivosa
se instala por sentir
y pensamiento
borrando todo dolor...
y se hace una belleza
recordar toda la grandeza
que de su amor dejó en la mesa
y que hoy los amados
dejan también sus dones
lo que de suyo aprendieron
a sembrar en el camino
a pesar de los dolores
enjambres de bondades
y pimpollos de dulzor.
Venga la sonrisa cierta
a quedarse en esta huerta
que sus hijos e hijas plantados
están al buen cuidado de Dios
y nos lleva por el sendero
del despertar verdadero
encendido en el centro del corazón.
Mi madre gustaba preparar ricos alimentos y sabrosos y le encantaba adornar la mesa con flores del campo que salia a recoger por el camino, ramilletes en algunos floreros improvisados por nuestra casa.
Recuerdo que ella nos enseñó a hacer rápidas y prolijas en nuestras tareas , revisaba nuestras quehaceres y en la mesa mientras compartiamos el pan , ella nos enseñaba como debíamos hacerlo mejor y después aprendí a que se pueden contar historias ,cuentos inventados por ella o que de los que aprendió desde niña a sus nieto y nietas, de esa manera ellos comían sin demora... y si recuerdo aún cuando mi hermano Mauricio pequeño y algo caprichoso la obligada a relatarle el cuento de la zorra que se hizo compadre del gallo, para zamparse a sus polluelos, aún me rio de eso...
La magia de su amor nunca se ha perdido.
Gracias madre querida , que sigues encendida en nuestros corazones.
El BRAZO DE REINA.
Este es un exquisito pastel muy tradicional en Chile.
Mi madre lo hacía relleno con manjar (dulce
de leche), o mermelada, la de ciruela, que era la que más le gustaba y porque la preparaba con las ciruelas de su huerto.
Ideal para la hora del té o incluso como postre.
Cuando chica recuerdo que era muy típico servirlo a la hora del té.
Ingredients
- 6 huevos
- 1 taza de azúcar flor cernida (azúcar impalpable)
- 1 taza de harina cernida
- 2 cucharaditas de polvos de hornear
- Manjar (dulce de leche, mermelada)
- Azúcar flor para espolvorear (azúcar fina)
Instructions
- Batir las claras a nieve e incorporar suavemente el azúcar, sin dejar de batir. Agregar las yemas de a una, luego la harina cernida con polvos.
- Vaciar a la lata del horno forrada con papel de mantequilla enmantequillado, emparejar y llevar al horno pre-caliente 350°F (180°C) por 8 a 10 minutos (sin dorar). El tiempo de cocción puede variar dependiendo del horno.
- Volcar sobre el papel espolvoreado con azúcar flor, desprender el papel en que se horneó, enrollar rápidamente ayudándose con el papel en que se volcó y dejar enfríar.
- Desenrollar y rellenar con el manjar y volver enrollar.
- Espolvorear con azúcar flor.
ResponderEliminarAy Magdalena, eres un encanto. Nos regales tu poesía, nos cuentas parte de tu vida y el amor inmenso de tu madre hacia sus hijos y de los hijos a ella y como fiesta final nos muestras una arrollado, que de verlo enciende el corazón, gracias por todo, receta incluida.
mariarosa
Que bello recuerdo nos regalas de la mujer que te dio el ser.
ResponderEliminarLas mamas de antes se preocupaban más de los detalles, pues aunque había menos de todo, no había tantas distracciones, y servir a los de casa con tanto amor les hacia felices.
Una entrada preciosa.
Un abrazo.
MARIA ROSA
ResponderEliminarSin dudas este es uno de mis poemas más entrañables de mi creación, atañe a todo lo que soy en suma y renueva ese lazo de amor que nunca se ha marchitado, sino fortalecido en el tiempo y el ahora con mis hermanos y mis sobrinos , somos una familia no numerosa lo que permite mayor cercanía y sentir.
Muchas cosas podríamos decir de nuestras madres, cada día un decir y un sentir diferente.
Abrazos .
ELDA
ResponderEliminarNunca una madre para quien recibió tanto cuidado y amor del bueno, puede pasar de largo..
En vida es donde se debe demostrar mejor ese respeto, cariño y preocupación por quien nos dio la oportunidad de llegar a este mundo.
Gracias.
Nada como una madre para colgar recuerdos, Magdeli.
ResponderEliminarDentro de un tiempo nosotras también seremos recuerdo y hemos de procurar que lo sean lo más hermosos posible.
Un abrazo.
Meulén, todo un homenaje a tu madre que nos emociona, amiga...En ti está su semilla, que es vela, azucena, grandeza y sonrisa constante...Sus floreros de casa aparecen en tus fotos de flores, que constantemente nos regalas...Ella está viva en ti, en tu cuerpo y en tu alma, no lo dudo, amiga...Gracias por ese pastel, típico de Chile, y su receta...Muy generoso por tu parte Meulén.
ResponderEliminarTe dejo mi abrazo y mi cariño siempre.
Todo lo que tú cuentas de tu mamá, de cuando compartían los alimentos en la mesa, me hizo recordar esa canción antigua que tal vez escuchaste:
ResponderEliminarMantelito blanco de la humilde mesa, donde compartimos el pan familiar. Mantelito blanco que bordó mi madre, en horas de invierno de nunca acabar.
Creo que esa canción encierra toda la nostalgia por el hogar y los padres que ya no están con nosotros.
Verdad que ellas sabían hacer todo, tenían precisión y muchas ganas de hacernos felices a todos, te copio esta receta porque de lo contrario la olvido, me encanto todo el poema. Y el postre riquísimo.
ResponderEliminarAbrazo
Abrazo
El poema es precioso, me ha encantado. Muchos besos. Voy a mirar la receta.
ResponderEliminarUn precioso homenaje el que le rindes al recuerdo de tu madre. Dejó en tí una honda huella, es lo que sucede siempre cuando damos amor verdadero. Ese amor está. como tu dices muy bien, en todos los detalles, en su paciencia, en el cariño, en el sacrificio de cada día, sin reparar en las horas que dedicaba a los demás. Es conmovedor.
ResponderEliminarEl dulce que nos muestras o algo que se parece mucho, también lo hacía mi madre. Lo llamaba "brazo de gitano" y recuerdo que estaba riquísimo,
lo más complicado es conseguir que no se rompa el bizcocho cuando se enrolla con el relleno, pero está bueno, bueno. Es una de esas cosas que yo no me he atrevido a hacer y la verdad, lo había olvidado completamente. Ahora me quedaré pensando en mi madre que hace ya muchos años que murió.
Con el mayor afecto. Franziska
Tecla
ResponderEliminarHermosa amiga, sientes como yo...
muchas gracias.
María Jesús
ResponderEliminarTe saludo con mucho afecto estimada y gracias por compartir en este día este sentir...
Las cosas de ella son muy hermosas de recordar y de seguir haciendo parte de su legado en la cocina y en el hogar.
Abrazos.
Lilian
ResponderEliminarQue linda canción traes a colación y es verdad esa canción era muy especial en los días de mamá...
me la enseñaron en el colegio de niña y hasta ahora la recuerdo.
Todo lo hermoso queda por siempre grababo en nuestros corazones.
Abrazos.
María del Rosario.
ResponderEliminarQue bien amiga
en los sabores de la mesa nosotros siempre recordamos a mi madre
Bendiciones a tu vida.
Saludos Teresa
ResponderEliminarTengas linda semana y mejores pasar a tu vida.
Franziska
ResponderEliminarLlevas mucha razón en lo que señalas, una madre bienamada y que supo dar a sus hijos todo es sin duda su legado...mi madre nos crió sola en una época difícil y de mucha necesidad ,supo batallar y salir adelante educándonos a los tres hijos, eso decía ella era su mejor herencia y así fue , pero lo mejor fue ese amor incondicional y férreo que cultivo entre nosotros y que sigue palpitando en cada uno de sus hijos y su herencia.
Pues en cuanto al pastel recuerdo que ella siempre espolvoreaba un poco de azúcar flor o impalpable en un paño y ahí colocaba el biscocho, luego colocaba el relleno, y comenzaba a enrrollarlo de a poco , nunca vi que se le quebrara
Te dejo un abrazo.
Me he quedado mirando ese sereno rostro de tu madre rodeada de esa juventud que empuja en el tiempo y crece.
ResponderEliminarMuy bello poema le dedicas, pero es que una madre es algo especial.
Muy rico ese brazo de reina, me llevo la receta, como bien dices puede que un día me anime y lo haga.
Gracias mil Magdeli, por esos intrincados y delicados dibujos que parecen encajes y nos los regalas en comentarios.
Un buen fin de semana y un abrazo.
Ambar
Qué maravilla de entrada Magdeli, es una preciosidad, y la receta tiene que estar riquísima. Muchas gracias amiga. Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala
ResponderEliminarAmbar
ResponderEliminarse que bien comprendes todo ese andar por la vida
mi madre sigue viva entre nosotros
uno siempre necesita de ellas , no importa la edad que tengas
su amor siempre será relevante en nuestro corazón y refleja lo que somos a diario.
Tengas lindos días
gracias siempre.
Pepe
ResponderEliminargusto de verte como siempre
y si ese brazo de reina siempre ha sido muy bueno.
gracias.