Corazón de espinas.

                               (las fotos son personales , de mi plantación de cactus y crasas)

Tanta belleza esconde tu piel
       espinosa , filuda
eres para el que escribe
la contra
        del canto florecido...
por esas puntas 
en que entallas tu cuerpo
y te plantas delante
       desafiante 
          de tu semblante sin ojos 
que quizás por que 
espacio de tu barril 
abarrotado de púas
          me miras suspicaz



Ahí
te observo 
en una masa verde 
     apretada
          sin miedo
mirando 
      buscando 
el haz de luz
      aferrado a la tierra
semejante al desierto



No falta valentía 
a cada brote 
      por tu cuerpo enhiesto
aunque pareces 
tan extremo
         solitario
enemigo de nidales
enemigo de las manos
         huraño de caricias



Te admiro. 
Te converso
aprendiendo de tu raíz
minerales del universo
sosteniendo una historia
venida desde tan lejos

siempre estarás ahí
cual candelabro
         sin temores
como aquel del desierto
que enfrenta la adversidad
de los abruptos momentos
       calcinado de sol
              aferrado a la roca
soportando las tormentas
lo amargo del suelo
así resiste
         el paso del tiempo



Más uno espera 
desde tu corazón
la sangre
la admiración
verte surgir
bañando de esplendor
la primavera.



De ese centro sanguíneo
renace la vida
            lo esencial...
a pesar de todo
de tanto resentir
ese intenso peregrinar
que nos sabe espinudo
         lastimero
revierte el mirar
y tú te haces sabor
          de picaflor 
o de la boca del peregrino
conocedor de tus virtudes
        alimentarias...



Ahí estás 
nos haces recordar
que existe la belleza
          la fuerza primaria
explotando en el fuego
corazón del ser
        manos aguerridas
tú nos enseñas
que en medio
de la aparente aridez
entre tanto soportar la dureza
los dolores de agujas
          donas tu corazón
y vendrá en ese amanecer
la flor de la primavera
entonces
      saldrá al viento 
          a los ojos de la luna
la belleza de lo esencial
que germina
desde las raíces  
         de toda la Tierra.



Y yo solo seré
    quien otra vez
                se enamora
y deja caer a tus pies
   la lágrima 
          para tu riego
para agradecerte
         lo que me das
como al peregrino
entre las magras vivencias
una felicidad 
profunda
       semilla
             de mi corazón.-

Meulen/2018.-

(este cactus es de mi amiga Pauli del norte de mi país, donde si crecen a su antojo y florecen de maravilla)

Señalar que adoro los cactus, de a poco voy descubriendo estas hermosas plantas que sin dudas me dejan rastros de dolor cada vez que los atiendo...como sea , es una alegría verlos crecer y donar cuando les da la gana y el clima donde vivo lo permite alguna flor...